Amado papá
Por: Gustavo García Figueroa
Viceministro general
Ministerio del Interior
Hoy en tu cumpleaños celebro que el destino nos brinda ejemplos de vida como lo eres tú. Muchos se lamentarían al ver atrás cuántos momentos difíciles hemos pasado, cuánto nos hemos extrañado en la distancia y cómo la familia ha tenido que esperar con abnegación mientras la vocación de servir y no callar ante la injusticia te ha dispuesto otros menesteres.
Pero no. En nuestro hogar hemos concebido tu sentimiento de arquetipo moral dispuesto a servir con convicción y entrega a la causa social, a no desfallecer ante las desavenencias que han ocurrido, y por el contrario a entender que en lo poco o mucho que podemos hacer lo mejor es asimilar que te debes a un interés superior de tu país y tu departamento.
No han faltado las voces que han pedido tu silencio, que rebajes tu beligerancia y que acerques tus convicciones a las cómodas concertaciones inescrupulosas que garantizan el bienestar de unos pocos. Ante esas circunstancias siempre han encontrado una respuesta clara: coherencia y perseverancia.
Esas cualidades se forjaron en el campo, en el trabajo noble de la tierra, esa tierra a la que siempre llevas en tu corazón y quieres volver como atendiendo un llamado incesante que susurra la cuenca del río Mayo, esa misma tierra en la que los abuelos Pedro Antonio y Mercedes forjaron una familia numerosa y unida alrededor de la gran casa amarilla.
Siempre con el corazón humilde y noble sufriste en carne propia y en varias oportunidades el enfrentarse con las maquinarias del poder que se interpusieron en tu sueño de ser legislador en Colombia; pero también, esas mismas clases enquistadas en los techos del poder han sido testigos de cómo materializaste tus aspiraciones con la convicción indeclinable de lograr el favor de la gente, sirviéndola denodada y honradamente.
Es así como siendo hijo de un campesino has demostrado que los sueños se cumplen con el coraje y el trabajo duro, que forjaste una loable carrera política, y que aún quienes critican tu actuar reconocen que no has perdido el rumbo, sino que lo has abierto a través de maniguas insondables, consolidando un ejemplo que hoy, en la conmemoración de un año más de tu vida, es merecedor de reconocer y retribuir por parte de tu familia, de tus amigos y de todos a quienes has impulsado con alma, vida y sombrero.
Feliz cumpleaños papá. Te amo.