En muchas ocasiones no le damos la importancia debida a las diferentes pandemias de salud mental que azotan hoy por hoy a nuestro mundo, alguno de estos padecimientos lo sufría un joven de 20 años de una comunidad en Voronesh- Russia quien tomo la fatídica decisión de terminar con su propia vida y también por accidente, con la de su hijo de 5 meses; Saltando de un piso superior en un edificio de gran altitud y cayendo intencionalmente encima del coche del bebé.
Según allegados al muchacho, él trató de buscar ayuda profesional por algunos “pensamientos obsesivos compulsivos que atormentaban su mente, ayuda que no le fue brindada y cuya situación desencadenó en la fatal consecuencia donde dos vidas se apagaron en una misma mañana.
Esta situación nos sirve a todos los habitantes de este mundo para generar la siguiente reflexión: Si alguien manifiesta tener inconvenientes mentales y solicita ayuda de verdad hay que prestarle atención y dársela. Los problemas de salud mental no son un mito, son una realidad que atormenta a muchos y muchas y deben ser tratados como cualquier otra enfermedad.