Gobernantes, les llegó la hora de trabajar
Está muy bien que todos los gremios nariñenses envíen mensajes de unión por los graves problemas que ha generado el derrumbe en la zona de Rosas; aplaudo la preocupación, ahora sí, de muchos sectores que antes enmudecían. Celebro el anuncio del Gobierno por comprometerse a construir la doble calzada Pasto – Popayán. Pero aquí hay que ser claros y darle la verdadera responsabilidad a quienes la tienen, y son únicamente los gobernantes y congresistas colombianos.
El compromiso del gran proyecto vial está anunciado, sin embargo, para que se dé, se necesita de un verdadero seguimiento político a quienes hemos elegido. Esa es una de sus principales funciones, velar por la región, sin tinte político. Si bien hay que esperanzarse en la doble calzada, también debemos estar muy atentos para que evidentemente se cumpla, y eso solo le compete a quienes nos tienen que servir ante las instancias necesarias. Legisladores y gobernantes, llegó la hora de tocarse y aprovechar esa oportunidad de unir a Nariño con Colombia.
Sin ánimo de ser negativo o escéptico, pero gracias al abandono que nos ha tocado, algunos tenemos el derecho de dudar y poder exigirles a los gobernantes que realmente trabajen por este anuncio histórico vial. Leí en redes sociales algo que me recordó lo triste de nuestras anteriores dirigencias.
Palabras más palabras menos y acoplándolo también a Nariño, porque la publicación se refiere al Cauca, cita: “Hace 74 años se empezó a hablar de la variante, Timbío – El Estanquillo. Pasaron 18 presidentes (incluidos los dos reelegidos), 18 representantes a la Cámara por el Cauca, 18 senadores caucanos, 18 gobernadores del Cauca. Era sabido que la única posibilidad de evitar la falla de Romeral entre Piedra Sentada y Timbío, era esa variante, sin embargo, le invirtieron miles de millones al tramo Párraga – Timbío, durante 60 años, para poder robarse la plata”.
Lo anterior es una causa real, por eso, señores dirigentes actuales y también a quienes se alistan para serlo: es ahora o nunca, tenemos una posibilidad histórica para conectarnos, por fin, con Colombia. Dejen el tinte político y pónganse a trabajar que para eso los pusimos a nuestro servicio.
Por: Emilio Jiménez Santiusti