Apareció apenas el año pasado en el contexto político de Pasto y es ahora una de las más fuertes candidaturas al Concejo municipal. Danilo Palacios es un antropólogo y comunicador de 33 años que se hizo conocer con sus videos de información electoral sobre Nariño en la campaña al Congreso de 2022. Se atrevió a decir lo que todo el mundo, a voces, ya sabía sobre la política tradicional del departamento y nadie decía. Luego, activó varios debates y luchas en la escena local combinando el activismo en redes con la presencia activa entre comunidades y territorios.
En 2022 fue uno de los líderes del proceso ciudadano que revocó el proyecto EMGETI de la Alcaldía que, según algunos sectores, privatizaba funciones de la planeación municipal y, supuestamente, amenazaba la gestión comunitaria del agua en los corregimientos. Desde ahí algunos vislumbraron su posibilidad política que combinaba muy bien con el tiempo histórico del cambio. Como antropólogo ha investigado la configuración social del ordenamiento territorial desde la base de comunidades indígenas, urbanas y campesinas que conviven en Pasto y lo ha hecho en relación a importantes procesos académicos. Este contacto le ha permitido conocer otras realidades y elevar denuncias y gestiones en defensa del agua, los bienes comunes y los derechos fundamentales de las comunidades. A partir de esto su propuesta al Concejo propone recuperar el control político ausente en la corporación desde una perspectiva urbano-rural, ambiental y cultural, que propone también nuevos circuitos de producción, consumo e intercambio. Su propuesta conecta muy bien con las comunidades indígenas y campesinas con las que ha trabajado, pero también con los jóvenes y el sector cultural donde ha construido procesos de gestión y pedagogía. Podría ser la sorpresa del voto de opinión.
La gente lee e interpreta como una buena señal que su campaña crece sin tanta parafernalia y plantea los temas fundamentales de la ciudad. No derrocha, no manda hacer gorras, bombas, camisetas, toneladas de refrigerios, y no da plata o bultos de cemento, arena y ladrillo a cambio del voto. Por el contrario, sus videos de campaña muestran algo hasta ahora inusual: algo parecido a un profesor explicando qué hace el concejo y cuáles son los compromisos que puede asumir y cuáles no, interesado en escuchar, y preocupado porque sus votantes conozcan y entiendan.
Tras los cambios de la pandemia y el estallido social la sociedad de Pasto reclama un cambio de paradigmas y de las voces que entonan las causas colectivas. El concejo municipal es el lugar donde se toman las decisiones más importantes del municipio y que inciden sobre muchas vidas y es absolutamente imperativo cambiarlo. Actualmente la movilidad, el plan de ordenamiento territorial, el espacio público, la juventud, el cambio climático y los presupuestos son temas en boga en la corporación y por esto debemos tomar conciencia del poder del voto. Para afrontar esa tarea necesitamos políticos con vocación de investigación, conocimiento y compromiso. La diferencia es que su proceso no empezó en campaña ni se puso hace dos meses el disfraz de candidato, sino que hace años ya lo ha demostrado. Todo está documentado en sus redes. Por esto el 29 de octubre seguramente será una de las sorpresas, el pueblo le va a votar y lo elegirá. Por lo cual, después, su compromiso es alto y al pueblo le tendrá que responder. Lo ubicas en el tarjetón como Pacto Histórico #10.